Con la llegada del año nuevo siempre aparecen bastantes revistas, libros, programas de televisión o radio, páginas web... todos hablando de las predicciones para el próximo año; incluso coincide que suelo tener varias consultas cuyo motivo es principalmente ver que es lo que va a ocurrir en este año que empieza.
Por eso me he decidido a escribir unas líneas sobre esta tradición, para expresar mi opinión sobre ello, espero que resulte del interés de todas (o al menos una buena parte, está bien empezar el año con humildad ;-)) las personas que leen está página.
Yo desde muy joven tuve interés por las predicciones del futuro, en gran parte debido a que a menudo tenía corazonadas o sueños premonitorios que luego llegaban a cumplirse, después con el tiempo aprendí que generalmente es mejor usar esta videncia natural para intentar ver venir las cosas en la distancia, pero sin forzar las situaciones ni intentar ver más allá de lo que naturalmente y sin esfuerzo vislumbramos.
De alguna forma esto es comparable a lo que algunas personas como Ludovica Squirru han llamado "predicciones preventivas", que como su nombre indica consisten más en intentar ver con que cosas hay que tener cuidado o que se puede hacer o dejar de hacer para que las cosas vayan por el mejor camino posible. En cambio, las "predicciones normales" consisten más bien en decir que va a pasar... y ya.
En mis consultas siempre suelo tener este tipo de enfoque a la hora de intentar ver el futuro, no pretendo que nadie me admire por haber dicho que ocurriría tal cosa 4 meses antes de que ocurriese, al fin y al cabo no es algo tan extraordinario decir lo que se ve, en cambio, conseguir ayudar a otra persona que lo necesita si es, al menos para mi, algo mucho más gratificante y que merece la pena intentar.
Pero bueno, este artículo trata de las predicciones para el año 2007.
La verdad es que yo no soy muy amigo de las predicciones demasiado generales, me parece un poco pretencioso pretender predecir el futuro de un país (como conjunto de millones de personas en una inmensa superficie geográfica), o de un grupo amplio de personas cuya característica común es haber nacido quizás entre el 23 de mayo y el 22 de junio... es fácil que haya unos 500 millones de personas que cumplan esa característica en este planeta...
Aún así, si veo que hay bastante coherencia a nivel de influencias sutiles en lo que a las fechas de nacimiento se refiere, pero son sólo eso, influencias de mayor o menor intensidad, que debido a que cada persona tiene unas circunstancias y características particulares, hacen que si haya unas líneas generales por las que discurren los caminos de las personas que nacieron en según que momento a nivel astrológico.
Esto no es un dogma de fe, es simplemente algo que se puede ver a nivel empírico si se tiene una mente minimamente abierta a aceptar las realidades que nos rodean, yo he visto como funciona cientos de veces y por eso lo tengo asumido como parte de la realidad, igual que el día y la noche.
Así pues, no le doy mucha importancia a este tipo de predicciones generales, todos los años compro el libro de Ludovica Squirru para ver que dice, de entre todas las predicciones para el año que viene que conozco esta es la que más confianza me da, tuvo años que acertó en mucho y otros en menos, pero a mi siempre me fue de ayuda en mayor o menor medida, y me consta que está hecho con honestidad y buenas intenciones, aunque al final a ella también le afecten los tiempos y la coyuntura que vivimos, y eso inevitablemente queda reflejado en sus libros si comparamos los de los últimos 6 años.
Luego tengo vistas predicciones generales que son auténticas charlatanerías, y solo espero que la mayoría de personas sepa distinguirlas de las otras que están hechas con seriedad, honestidad y buenas intenciones.
Hay un ejercicio muy divertido de hacer que consiste en escribir tu propia predicción para el año que empieza, a menudo se parece mucho a una carta de deseos que pareciese dirigida a los Reyes Magos de Oriente, pero es un ejercicio que merece la pena hacer, y si se hace sintiéndolo de verdad es fácil que una buena parte de esos deseos/predicciones lleguen a cumplirse de una forma u otra; no hay que olvidar lo que dice el dicho, es importante tener cuidado con lo que se desea, porque a menudo los deseos muy fuertes se hacen realidad.