El verano va pasando, y estas últimas semanas me centré más en trabajar en el interior del barco, quería ver si conseguía acelerar un poco el tema del motor, que entre unas cosas y otras lo voy dejando pasar y las cosas solas no se arreglan... es mucho más fácil desmontar y destripar un motor que volver a montarlo y hacer que funcione bien :-P
Luego además tengo todo el barco patas arriba y al final apetece poco ir ahí a hacer nada, especialmente ahora que hace buen tiempo, este es el aspecto que tiene actualmente:
En ese estado no sirve ni para invitar a los amigos a tomar un refresco, es que además está todo lleno de polvo porque tuve que meter la radial en el habitáculo del motor para poder cambiar un grifo de fondo... esto de los barcos viejos es así, te pones a arreglar un problema y aparecen 3 problemas nuevos...
La historia es que el grifo de fondo del agua del motor goteaba un pelín de agua, no gran cosa, pero me dije "ahora que está el barco fuera del agua voy a aprovechar para quitarlo y ver que le pasa", y cual no sería mi sorpresa cuando al ponerme a aflojarlo descubrí que se podía aflojar con la mano sin necesidad de llave inglesa ni nada, lo que ocurría era que el pitorro del grifo pegaba en la bancada del motor (donde va atornillado el motor al barco), de tal forma que cuando lo instalaron no debieron darse cuenta y primero pusieron el grifo y luego hicieron la bancada del motor, de tal forma que después no podían apretarlo sin romper la bancada que acababan de hacer en fibra de vidrio... vamos, la típica chapuza...
El caso es que para poder quitar el grifo de fondo viejo tuve que lijar la bancada del motor así:
Y claro se lleno el barco de polvo de mala manera, encima de polvo de fibra de vidrio que es súper tóxico y me da picores por todo el cuerpo, vamos, la cuenta para que junto al calor veraniego te den ganas de ir a la playa a bañarte y olvidarte del bricolaje.
Pero la cosa no terminó ahí, resulta que cuando estaba de rodillas en el suelo dándole con la radial a la bancada del motor, en un pequeño descanso se me ocurre mirar hacia arriba y veo que dos mamparos del habitáculo del motor se habían separado de cuajo, sabe Dios porque, y a raíz de eso se me ocurrió reptar por dentro del habitáculo del motor a ver como estaban las otras uniones de los mamparos, y había otra donde también se había roto la fibra de vidrio, además de la zona alrededor del tubo por el que pasa el eje de la hélice... con lo cual al final tuve que acabar lijando medio habitáculo de motor con la idea de apuntalarlo con fibra de vidrio aquí y allá:
Con todo esto se levantó mucho más polvo... y también yo fui un poco tonto, porque tendría que haber guardado todas las herramientas y trastos diversos en sitios cerrados para que no se llenasen de polvo, siempre sería más fácil quitar el polvo de superficies planas y lisas que no de una montaña de trastos diversos... pero bueno, son esas cosas que se te ocurren a posteriori, es el Sol del verano, que te deja el cerebro un poco seco.
En esta foto se aprecia la capa de polvo de fibra de vidrio que quedó por la mayor parte del barco, en dos palabras, un asco:
Y así quedó la cocina, como para ponerme a calentar la comida:
El caso es que después de mucho estudiar el libro que tengo de reparaciones en barcos de fibra de vidrio me puse manos a la obra con la resina y después de más horas de trabajo de las que me gustaría, el habitáculo del motor quedó apuntalado por los 4 costados, ahora falta ver el resultado una vez puesto el barco en el agua, porque si la reparación no fue suficiente lo más probable es que vuelvan a estropearse la reductora y la bocina del eje de la hélice... desde luego esto de los barcos viejos es un pozo sin fondo a la hora de invertir tiempo y dinero :-P
Después aproveché para darle un par de manos de pintura y el resultado final es este:
Una cosa muy típica cuando te pones a desmontar un barco viejo como en este caso, es que cuantas más cosas desmontas más cosas ves que necesitas desmontar para cambiar o reparar... por ejemplo en este caso al hacer esta reparación en fibra de vidrio tuve que quitar todos los cables eléctricos que hay en el habitáculo del motor, con lo cual llegué al sitio donde están las baterías, que estaba también bastante destartalado, con lo cual lo tuve que desmontar, rehacer y pintar.
Aquí está a medio montar, tengo pensado montarlo un poco diferente a como era en origen (entre otras cosas porque tuve que romper varias maderas para poder desmontarlo):
Realmente lo de pintar y barnizar es una de las tareas más gratificantes en un barco, porque por un lado es fácil y rápido de hacer, y por otro lado el resultado final siempre es bonito y agradable a la vista, en cambio puedes estarte días enteros arreglando un motor y lo único que tienes después es un montón de hierros medio oxidados y grasientos que no está del todo claro cuanto van a tardar en volver a dar problemas.
Pero bueno, así es la vida, no todo puede ser un camino de rosas, yo la verdad que me lo tomo con mucha filosofía y no me hago grandes problemas por nada, total, cuando me canso del barco marcho para mi bonito apartamento y me olvido de él hasta que me apetece volver por ahí a hacer algo de ejercicio.
Ahora lo siguiente será comprar los recambios para el motor, la reductora y el eje de la hélice... eso es lo peor, gastar dinero encima para luego tener que trabajar todavía más... así que lo haré con calma, que las prisas no son buenas para nada.