Ya han pasado casi 4 meses desde que me mudé a un apartamento en Ponta Delgada, y sinceramente pienso que fue una decisión muy acertada, a ratos es un poco duro, porque mantener un apartamento y un barco, ambos viejos, no deja de ser un incordio a nivel de trabajo, tiempo y dinero, pero bueno, es la vida, nada es fácil en los tiempos que corren.
Pero desde luego no me veía pasando otro invierno más yo sólo en mi pequeño barquito, en un puerto casi vacío y acompañado principalmente por las gaviotas de San Miguel, realmente los barcos son para navegar, para estar todo el tiempo viviendo en un mismo sitio es mejor vivir en un apartamento.
Y así es que estos últimos días estuve preparando a Xebec para el invierno, guardando todas las velas, cabos, capotas y demás bartulos dentro del barco, revisando las amarras, las defensas y demás detalles, este es el aspecto que tiene actualmente, practicamente el mismo que el año pasado por estas fechas:
En cambio el apartamento ya está más bonito que cuando me mudé a él a comienzos del verano, ahora ya hay alfombras, cojines, y hasta cosas bonitas por las paredes, un conjunto de grabados japoneses del siglo XIX, a menudo de temática marinera, combinados con algunas ilustraciones de animes del siglo pasado y otras cosas diversas:
Desde la mesa del comedor se ve así, ya sé que es más bien humilde, pero después de todo lo que pasé para llegar hasta aquí, me parece casi un palacio ^_^
Y la cocina está llena de comida buena que es lo más importante ;-) por no hablar del reloj de Nausicaa, auténtica y exclusiva pieza de artesanía azoriana, ya quisieran tener relojes así en Suiza:
Si alguien se estaba preguntando porque no escribía nada últimamente, entre otras cosas fue porque anduve líado con el bricolaje doméstico, el apartamento había estado cerrado mucho tiempo y realmente tenía un montón de detalles que arreglar, por ejemplo los barrotes de la cocina:
Y alguien se preguntará "¿quien sería el brillante arquitecto al que se le ocurrió poner barrotes en la ventana de una cocina con vistas al Mar y que está orientada al Sur?", no se sabe, pero lo cierto es que es algo muy típico de Ponta Delgada, caminando por la calle se ven innumerables edificios con ese estilo de ventanas, hay quien dice que se debe a que "aquí está tudo torto porque ainda não há estudos de Direito na Universidade".
Después al mismo arquitecto torto no se le ocurrió otra cosa que levantar un muro en la terraza de la cocina para impedir que se vea el Mar cuando se está sentado comiendo al Solín... las personas bajitas tienen hasta que ponerse de puntillas para poder ver el Mar... porque es un piso alquilado, si no apañaba un martillo y lo arreglaba en un momento.
Otra famosa tradición de Ponta Delgada consiste en poner algún tipo de imagen en el portal que represente a las personas que habitan la casa, algo así como una especie de amuleto protector, aproximadamente la mitad de las casas tienen alguna imagen de este tipo en la puerta, siendo con diferencia la más habitual la del Señor Santo Cristo de los Milagros:
Para quien no lo sepa, el santuario del Señor Santo Cristo de los Milagros, que está en Ponta Delgada, es el segundo más visitado de todo Portugal después del de Fátima, y puedo dar fe que su culto está muy arraigado en la isla, hasta el punto de que un gran porcentaje de taxis, autobuses, coches particulares y pequeños comercios están profusamente decorados con esa temática; hay mucha gente que asegura que la estatua en efecto obra milagros, yo como nunca le pedí nada no puedo dar una opinión al respecto.
Después, otras casas optan por una imagen más alegre y con menos sangre (el Santo Cristo representa a Jesús amarrado a una pilastra recibiendo latigazos), por ejemplo la Sagrada Familia:
Y también hay quien opta por una imagen historicamente más reciente, como la Madre Teresa de Calcuta:
Luego de vez en cuando ocurre que un yatista otaku termina por alquilar un apartamento y es nombrado presidente de la comunidad... lo cual lleva a que haya algún edificio en la isla que tiene un Totoro dando la bienvenida a los visitantes que vengan con buenas intenciones:
Tengo miedo que sea el único edificio de todo Azores, sino de todo Portugal, que tenga un simpático Totoro en la puerta de entrada o_O
Bueno, pues este es el resumen de las cosas triviales que anduve haciendo durante los últimos meses, otro día si me siento más inspirado quizás hable de las cosas más trascendentales, que haberlas haylas pero de momento es mejor dejarlas reposar ;-)