Escrito el 1/Enero/2024 por Nacho
En vista de que durante el año 2023 tuve que explicar a cientos de personas por qué no tengo móvil ni WhatsAPP ni redes sociales, he decidido empezar 2024 explicándolo detalladamente en mi web.
En pocas palabras, es porque lo considero un sistema de control y manipulación, totalmente antidemocrático, y que atenta directamente contra los intereses de la mayoría de personas que habitamos este planeta.
El problema es que esta historia de "la digitalización de la vida" lleva a que sea posible controlar automáticamente lo que cada persona ve en las pantallas, monitorizar como reacciona ante ello, y de esa forma influir en el conjunto de la sociedad para llevarla por donde unas pocas personas no elegidas democráticamente quieren.
Hice el siguiente esquema para que se entienda mejor, el señor de la corbata representa al poder financiero global, las cajas azules representan la infraestructura informática del Internet Oficialista, y la niña con su iPhone al usuario promedio siendo manipulado por su telepantalla sin darse cuenta:
En resumen, la mayoría de personas usan sus telepantallas sin percatarse de que:
- Lo que ven y hacen con ellas es sólo una parte minúscula de todo lo que tendrían que poder ver y hacer si estas no estuviesen tan manipuladas y censuradas como están.
- Además TODO lo que hacen con ellas se monitoriza hasta extremos increíbles, de tal manera que es posible saber como se siente cada persona ante determinadas noticias, whatsapps o memes, y en base a ello predecir como actuará en situaciones futuras.
- Por último, este sistema de control tiene dueños: los accionistas mayoritarios de las grandes empresas tecnológicas, que son básicamente las personas con más dinero del planeta, y usan el poder que este sistema les da para manipular el mundo según sus intereses particulares.
Quizás se entienda mejor con algunos ejemplos:
- Elecciones "libres y democráticas": dejan de serlo en el momento en que los dueños de las grandes empresas de Internet pueden mostrar a los electores sólo la parte de la realidad que decidan, monitorizar su reacción y su intención de voto, y seguir influyéndoles hasta conseguir que el resultado final sea lo más cercano posible a sus deseos.
- Guerras convenientes: se hace posible usar un conflicto bélico para justificar cualquier cosa, por ejemplo el aumento de los precios y la caída del nivel de vida; basta con ir mostrando según que noticias o memes, viendo como reacciona la gente e ir modificando los mensajes, los acontecimientos, y la censura hasta que se consigue llevar a la opinión pública por donde se quiere.
- Inflación: este sistema permite ir subiendo los precios de manera gradual y controlada mientras se monitoriza la reacción de la gente, de tal manera que se les va hundiendo en la miseria gradualmente sin que llegue a haber nunca un estallido social.
- Amenazas ficticias: también se hace posible inventar cualquier amenaza ficticia, ya sean unos terroristas selenitas o un virus mutante, e ir monitorizando como reacciona la gente mientras se altera el discurso y las medidas prácticas dependiendo de la reacción en tiempo real de la población.
- Criminalización de la disidencia: es tan simple como mostrar todo tipo de mensajes difamatorios y negativos mientras se censuran todos los demás, y al mismo tiempo se comprueba como se modifica la opinión pública mayoritaria.
- Condicionamiento a la carta: de la misma forma se puede condicionar a la población apantallada con las ideas más inverosímiles, desde que "los animales son personas" a que "la desnutrición es genética" o que "la obesidad es sana".
Al margen de todo esto, está la actitud psicológica que induce en cada persona el saberse vigilada y monitorizada continuamente, se pierde así espontaneidad y naturalidad, y se pasa a actuar inconscientemente como dice la pantalla que se tiene que actuar.
Esto no es algo nuevo, sino que ya fue descrito en el siglo XIX en relación con el diseño de cárceles, en las que se trataba de que los prisioneros se sintiesen constantemente vigilados para que así diesen menos problemas.
Un ejemplo de esto es la cárcel tipo Panopticón:
Copio y pego de la Wikipedia:
El objetivo de la estructura panóptica es permitir a su guardián, guarecido en una torre central, observar a todos los prisioneros, recluidos en celdas individuales alrededor de la torre, sin que estos puedan saber si son observados.
El efecto más importante del panóptico es inducir en el detenido un estado consciente y permanente de visibilidad que garantizaría el funcionamiento automático del poder, sin que ese poder se esté ejerciendo de manera efectiva en cada momento, puesto que el prisionero no puede saber cuándo se le vigila y cuándo no.
Además, por una serie de cuestiones técnicas largas de explicar, el usar una telepantalla oficialista implica un riesgo muy real a nivel de seguridad física, en el sentido de que se pueden falsificar los mensajes que se envían y reciben, obtener todo tipo de contraseñas y modificar los contenidos del teléfono sin que el usuario sea consciente de ello.
Siendo usuario/a de una telepantalla te pueden convertir en un instante en un suicida, un terrorista, un pederasta o un agitador proruso, o las 4 cosas al mismo tiempo si les de la gana! y vete tú a explicarle a un juez, que estudió derecho, que casi cualquier dispositivo electrónico de uso doméstico es un colador a nivel de seguridad y no tendría que ser admitido como prueba en ningún tribunal.
El hecho objetivo es que las telepantallas están llenas de agujeros de seguridad, cada semana se hacen públicos unos pocos y se van parcheando, pero antes de eso ya estaban ahí y pudieron haber sido usados para cualquier cosa, desde una suplantación de identidad a un secuestro o vaciarte las cuentas bancarias, es algo que ocurre todos los días y yo conozco casos concretos, pero jamás salen en las noticias, se censuran sistemáticamente para que la gente no pierda la confianza ciega en sus telepantallas.
En Argentina mucha gente ya se ha dado cuenta de todo esto que explico y es habitual encontrarte grafitis antipantallas en cualquier calle:
Yo llevo 25 años trabajando con sistemas Unix (Android e iOS son Unix castrados), compilo todos los programas que uso, tengo hardware especialmente seguro, servidores propios de correo, mi propia nube, y un montón de cosas más, y aún así soy consciente que no puedo garantizar al 100% (ni al 50%) la seguridad y privacidad de todo lo que hago, incluso sin tener teléfono móvil ni usar nada parecido a WhatsAPP ni redes sociales.
En otras palabras, que todo lo que es informática hoy en día está al servicio de quienes mandan, pero aún dentro de eso hay distintos "niveles", y los teléfonos móviles están por así decirlo en el nivel más mediocre y opresivo desde un punto de vista técnico.
Es decir, que lo mejor que se puede hacer es tan simple como difícil: no usar telepantallas.
Y si eso no se puede al menos usarlas lo menos posible y para cosas poco críticas, teniendo siempre presente el riesgo que suponen y que son algo que contribuye a despojarnos de todo lo bueno que tenemos para favorecer a una élite no electa que pretende ningunear nuestras instituciones democráticas y a nosotros mismos.
Pero que nadie me malinterprete, no estoy diciendo que haya que dejar de usar la telefonía móvil para siempre, lo que estoy proponiendo es:
- No usar las telepantallas mientras sigan estando controladas por esa élite antidemocrática que las usa para sus fines egoístas en contra del bien común.
- Exigir que se encuentre una forma de gestionar estas nuevas tecnologías de manera democrática y para el bien común.
- Pedir responsabilidades penales a los actuales dueños de las grandes empresas tecnológicas; casi vale más empezar por ahí, porque con lo que tengan que pagar en daños y perjuicios no hará falta ni expropiarles.
Sé que dejar de usar telepantallas es "demasiado complicado" para la mayoría de personas hoy en día, pero pensemos en lo efectivo que sería si tan sólo 1 de cada 4 personas dejásemos de usarlas: todo este monstruoso sistema de manipulación y control a nivel planetario se volvería inútil en cuestión de días.
Piénsalo fríamente: el mayor, más caro y más opresivo sistema de control que ha conocido este planeta inutilizado con un gesto tan simple como apagar un aparatito y no volverlo a encender en una temporada.
Nunca fue tan fácil, barato y legal luchar contra la tiranía ;-)
Es incluso apto para vagos y cobardes!
No es realista pretender volver al tiempo en que no había Internet ni móviles, de lo que se trata es de usar estas tecnologías para cosas realmente buenas y necesarias, y dejar de pretender usarlas para todo "digitalizando la vida", esto último no es más que una imposición del poder financiero global para intentar hacerse dueños del planeta, es un delirio de un puñado de mentes enfermas, nada más, no nos conviene a nadie, ni siquiera a ellos mismos.
Las cosas buenas de la vida no son digitales, son analógicas, y para disfrutarlas lo que hace falta es que ese puñado de oligarcas que pretenden usar la tecnología para esclavizar a la humanidad sean puestos en el lugar que les corresponde por las instituciones democráticas que sí nos representan.
Así pues, mi deseo para el año 2024 es: que haya una huelga planetaria de telepantallas que eche abajo la tiranía del poder financiero global.
Sé que es un deseo ambicioso, pero no me parece imposible, al fin y al cabo la gente no puede dejar de comer o respirar, pero sí podrían pasar unas semanas con el teléfono móvil apagado dentro de un cajón.