Originaria del Norte de Italia pero afincada en Reino Unido desde hace muchos años, esta joven y poco conocida dibujante de comics me llamó la atención por la sinceridad y espontaneidad de sus comics de tipo autobiográfico, que son de los pocos que conozco que hablan de la realidad que vivimos hoy en día (año 2018) sin tapujos y llamando a las cosas por su nombre.
Es posible que nunca llegue a ser tan mundialmente famosa como Miyazaki o a dibujar tantas páginas de comics como Osamu Tezuka, pero lo que si que ha demostrado de momento es ser tan valiente como ellos, hablando de la realidad que la rodea sin pelos en la lengua e ignorando los patrones de lo políticamente correcto, tan rígidos (o más) en la Europa de hoy en día como en el Japón de los años 70 y 80 del siglo pasado.
Que yo sepa, de momento no tiene nada editado en papel, pero la mayor parte de sus obras pueden verse directamente en:
- Su página web: Comics e ilustraciones
- su DeviantArt
- su DA Portfolio
- su twitter
- y su facebook
Desde mi punto de vista las más significativas son las de tipo autobiográfico, incluso aunque coincida que son las menos elaboradas gráficamente, principalmente estas dos:
- ¿no tienes pareja? estupideces que te dicen cuando estás soltera: un sincero y realista recorrido por las dificultades que mucha gente enfrenta para encontrar pareja en nuestra sociedad, especialmente cuando aspiras a una relación "sana" y funcional.
- Zumo de Naranja: su experiencia intentando integrarse socialmente en el Londres de comienzos del siglo XXI, una historia tan dura y valiente como habitual y poco visible, y que a pocas personas dejará indiferente.
Como quiera que sea, una autora valiente donde las haya, no en vano, en los ratos libres se dedica a escalar montañas sin tenerle miedo a nada:
Así fue que cuando me topé casualmente con sus comics en Internet (junio de 2018), no pude dejar de escribir esta breve reseña en mi página web, aportando mi granito de arena para que sea un poco más conocida en el mundo de habla hispana.
Puede no resultar obvio, pero los tiempos que corren no son nada favorables para la creación artística independiente, y mucho menos cuando esta crítica y saca a relucir las miserias de la sociedad; en general en todo momento y lugar hay artistas de talento, pero habitualmente sólo consiguen tener una visibilidad relevante en condiciones sociales y económicas muy particulares, como pudo ser el Japón de finales del siglo XX, el siglo de oro español, o la época del impresionismo francés.
Fuera de estos momentos históricos favorables, las cosas son más cuesta arriba, pero aún así pienso que no hay que dejar de intentar hacer lo que se pueda, al menos así cuando algún día miremos atrás podremos sentir nostalgia de un pasado, que si bien no fue fácil, al menos si fue intenso y gratificante.