Escrito el 11/Mayo/2022 por Nacho
Después de dos semanas visitando la Europa postcovid ya estoy de vuelta en Azores, me vino bien el viaje para despejar la cabeza después de tanto tiempo en esta diminuta isla, y también me sirvió para reflexionar sobre como ha evolucionado la gente en estos últimos años y que puede ocurrir a continuación.
un pueblo que conserva su magia a pesar de los tiempos turbulentos que vivimos.
Lo que más me llama la atención es que todos hemos cambiado mucho, pero quizás a un nivel más bien superficial y visible, a un nivel más profundo veo que la inmensa mayoría de la gente sigue con los mismos esquemas de siempre: aferrados/as a un sistema que pretende garantizar su bienestar material y humano, cuando si algo ha quedado claro en estos últimos dos años es que eso ya no es así, si es que alguna vez lo fue, que probablemente en pocos sitios y momentos históricos lo haya sido de verdad.
También me temo que, al menos en lo que fue hasta hace poco "la próspera Europa", la gente se volvió muy débil a todos los niveles, en gran parte imagino que por haber tenido vidas relativamente fáciles, y en parte por toda la manipulación psicológica y de otros tipos a la que se ha visto sometida durante décadas, por no hablar de las enfermedades físicas y mentales que atenazan ya a más de la mitad de la población según cifras oficiales.
El resultado que veo no es otro que un rebaño de personas dóciles y dependientes, donde incluso quienes reconocen la farsa del discurso oficial en el fondo sólo aspiran a salvar "lo suyo", sus trabajos, sus subsidios, su patrimonio, su salud, su familia... es una estrategia y actitud comprensible, porque es verdad que no hay una alternativa clara al actual estado de cosas, pero al mismo tiempo es fácil ver que ese individualismo sólo puede llevar al desastre colectivo en poco tiempo.
Está claro que las soluciones a problemas colectivos sólo pueden ser también colectivas, aunque mucho me temo que al menos en la Europa de hoy en día no hay margen para ello, la inmensa mayoría de la gente no solo tenemos atrofiada la capacidad de actuar colectivamente, sino que para muchos, a pesar de todo, el Sistema les da más de lo que les quita, y en el fondo no quieren un Sistema nuevo, sino más bien conservar sus privilegios en el actual estado de cosas con el menor esfuerzo posible.
En mi caso, reconozco que en conjunto he vivido bien a nivel material la mayor parte de mi vida, pero valoro mucho más las "riquezas espirituales" que cada día nos roban un poco más con la intención de poder dominarnos mejor; si conviertes a un ser humano en un ser inhumano que sólo se rige por sus necesidades físicas puedes conseguir controlarle mucho mejor, pero a la larga eso destruye la sociedad humana, que es lo que en última instancia produce las riquezas materiales que la hacen funcionar.
Ya sé que está ahí el "Modelo Chino", para muchos el patrón a seguir a nivel planetario, pero es sólo un espejismo causado por el desarrollo tecnológico, que consigue aplazar el desastre de hoy a costa de hacer el mundo más invivible mañana, requiriendo por ello nuevos avances tecnológicos pasado mañana para que todo el edificio se mantenga en pie un poco más, al mismo tiempo que se hace también más frágil...
Este tipo de cosas son las que pasan por mi cabeza mientras miro el paisaje desde la ventanilla de un tren, así de raro soy, y ni siquiera tengo móvil, mucho menos Whatsapp!
No sé si será porque llevo casi media vida dedicándome a predecir el futuro, pero a menudo tengo la sensación de ver las situaciones venir a lo lejos sin ni siquiera pretenderlo, como cuando ves aproximarse unos nubarrones negros y piensas "va a llover".
Y en estas semanas que anduve por España y Portugal tuve claramente la sensación de que el futuro es fácil de vislumbrar: quienes mandan llevarán el mundo al desastre y una gran parte de la gente les seguirá sin ni siquiera cuestionarlo, mientras que una minoría intentará salvarse como pueda, pero en general aferrándose a lo antiguo, sin intentar construir "lo nuevo", simplemente intentando perder lo menos posible de lo que ya se tiene.
Las estructuras nuevas y mejores me imagino que van a tardar un tiempo en materializarse, me gustaría pensar que es un proceso que puede acelerarse como comentaba hace 4 meses, pero cuanto más entiendo lo que ocurre dentro de la gente más llego a la conclusión de que es un proceso largo, se mire como se mire las riquezas del alma cada vez son más valiosas y necesarias.
Supongo que es inevitable, en el fondo una sociedad es comparable a un edificio, cuando este está demasiado deteriorado y le fallan los cimientos es inevitable que se derrumbe, ya sea de manera controlada o no, y sólo después es que se puede comenzar a construir algo nuevo sobre bases nuevas.
Quienes mandan se dan cuenta de esto y están intentando llevar a cabo una demolición controlada de la sociedad al tiempo que pretenden construir otra sociedad nueva que no es sino un engendro amorfo y sin sentido, pero no parecen darse cuenta de que son ellos/as quienes más encadenados están en el centro de ese edificio que pretenden demoler controladamente.
Imagino que hasta que no empiecen a caerles los escombros encima no se darán cuenta de lo que han hecho.
Pienso que el futuro será de quienes han tenido vidas difíciles hasta ahora, de alguna manera gracias a eso son más fuertes y están mejor preparados íntimamente para hacer frente a lo que vaya a ocurrir en los próximos meses y años.
No me preocupan los planes de quienes mandan, sé bien que no son más que marionetas psíquicas de sus propias víctimas, y estas en el fondo lo que buscan es el restablecimiento de la armonía primigenia, de su esencia humana que les ha sido secuestrada y permanece encadenada y encerrada en algún rincón de su psique, horadando desde ahí los cimientos de la monstruosa construcción en que se ha convertido esta civilización.
Toda esa energía psíquica reprimida a nivel planetario es algo terrible, mucho más poderosa que todos los ejércitos juntos, actúa invisiblemente en unos y en otros, siguiendo su propia agenda y engañando a quienes mandan como si de niños de 4 años se tratase.
En la foto Burgos con su catedral al fondo.
Pero entiendo que todo sigue su curso, como el agua que fluye, subiendo de nivel hasta encontrar un camino por el que continuar su lento, pero imparable, viaje hacia el Mar:
En cuanto a mi, si algo me ha quedado claro en estos dos últimos años es que no pinto nada ni en Europa ni en esta sociedad dominada por el Mal, por un lado la censura no para de aumentar, impidiendo que mucha gente lea lo que escribo, y por otro lado la inmensa mayoría de la gente está cada vez peor a nivel psicológico y espiritual, yo lo veo claramente en mis consultas, la gente lo está pasando muy mal íntimamente, cada vez peor, y ni yo ni las cartas del tarot pueden ayudarlas, porque el problema está en su entorno y este cada vez es más opresivo.
Mi único consejo es el "poner tierra de por medio" y "echarse al monte" como quien dice, no sé cuanto durarán estos tiempos turbulentos, pero desde luego el mejor sitio para hacerles frente es lejos de las ciudades y cerca de personas afines, no puede ser de otra manera.
Así es que no creo que me quede mucho más tiempo en Azores, aprovecharé esta "tregua" para irme a algún sitio que al menos no sea tan fácil de convertir en una cárcel, y donde haya más gente consciente de la realidad que vivimos, e intentando hacer algo por hacerle frente de la mejor manera posible.