Escrito el 30/Noviembre/2021 por Nacho
Me temo que hay algo extraño, pero muy importante, que está pasando desapercibido en medio de tantas crisis que tenemos a nuestro alrededor, me refiero a que se están perdiendo los afectos, la capacidad de amar, el ilusionarse de una manera profunda y luminosa por las cosas bellas y maravillosas de la Vida: es la Crisis del Amor.
Yo hace años que lo noto porque cada vez tengo menos consultas por temas sentimentales, y las que tengo trasparentan una especie de angustia o necesidad desesperada que tiene poco que ver con la calidez, ilusión y sosiego de hace tan sólo 12 años; mucho me temo que la mayoría de personas nos hemos endurecido más de la cuenta en este aspecto, sin duda porque algo en nuestro entorno nos ha empujado a ello.
Todo esto puede parecer una "impresión subjetiva" o incluso "nostalgia romántica", hasta que un buen día tropiezas con los datos y hechos tangibles que causan el problema, y eso es lo que me ocurrió hace pocas semanas cuando este libro llegó a mis manos:
El mismo autor del libro escribió este artículo sobre la sexualidad femenina en el Franquismo, basado en datos oficiales de la época, y que muestra como la sexualidad y las relaciones de pareja en la España de hace 70 años eran mucho más ricas, sanas y llenas de Amor que hoy en día; es un artículo muy recomendable para tener un referente con el que comparar la situación actual.
Aunque el objetivo principal del libro es explicar las causas y posibles soluciones al hecho de que cada vez nacen menos niños, en la práctica al hacer esto demuestra que el deterioro de las relaciones humanas y afectivas es algo intencional, llevado a cabo no sólo con el objetivo de reducir la natalidad, sino también de dominar más fácilmente a una población cada vez más vulnerable y desorientada.
Algunas de las causas obvias de esta "Crisis del Amor" serían las siguientes:
Fomento en los medios de comunicación, incluyendo videojuegos, de roles sexuales cada vez más sórdidos, violentos y carentes de sentimientos; esto que en muchos adultos ya tiene una influencia notable, en los niños y jóvenes es debastador, ya que ellos no tienen los referentes de hace 20, 30 ó 40 años que podemos tener los adultos.
Pornografía gratis por todos lados, cada vez más brutal y alejada de cualquier cosa que sugiera sentimientos, o que el sexo puede, y debe, ser la consecuencia del Amor, y no sólo eso, sino que los propios medios oficiales reconocen que los niños comienzan a ver pornografía a los 8 años, y lo dicen como si fuera algo normal que no va con ellos! como si hoy en día lo que la gente ve y hace en Internet no estuviese totalmente controlado por los mismos que controlan esos medios y la propia industria pornográfica.
Fomento de drogas legales e ilegales con la intención de anular y atontar al mayor número posible de personas, no hace falta ser un lince para ver que al mismo tiempo que dicen estar "en contra" de estas hacen todo lo posible por fomentarlas, la legalización del cannabis en muchos países, unida a campañas de desinformación sobre su falsa inocuidad, es buen ejemplo de ello.
Propaganda constante sobre violencia machista (causada en gran medida por todo lo anterior), que genera mutua desconfianza entre hombres y mujeres, de estos hacia ellas por las leyes discriminatorias fácilmente abusables, y de estas hacia ellos por la imagen negativa y brutal de los hombres que transmite dicha propaganda y los medios de comunicación en general.
La presencia, supuestamente intencionada, de disruptores hormonales en el agua, los alimentos e incluso los productos de higiene femenina, algo que entre muchos otros daños causa la falta de desarrollo físico, intelectual y sexual de los hombres, como por desgracia puede apreciarse en los jóvenes y los niños a nuestro alrededor, que no son como los de hace 20, 30 ó 40 años.
Y por último, pero no menos importante, la creciente precariedad material que cada vez impide a más personas cubrir sus gastos y necesidades básicas por si mismas, lo cual obviamente es un obstáculo enorme para las relaciones afectivas basadas en sentimientos, no en intereses materiales.
Y si eso son las causas principales, las consecuencias de esta falta de Amor son todavía más terribles:
65.000 mujeres intentan suicidarse cada año sólo en España, y unas 1.000, junto a otros 3.000 hombres, lo consiguen; pero nunca te lo contarán en el telediario, en vez de eso dan las cifras como 20 tentativas por cada suicidio consumado, sin distinguir por sexos, para que no cante demasiado que cada día casi 200 mujeres intentan suicidarse sólo en España (y las cifras reales seguramente sean mucho mayores).
El 40% de las mujeres españolas consumen psicofármacos, aunque los datos oficiales se censuran, y lo único que conseguí encontrar fue este estudio de 2010 que aún siendo bastante revelador no refleja el aumento del problema en los últimos 11 años, de lo cual ahora le echan la culpa al Covid.
De destacar que según el anterior estudio, España es el segundo mayor consumidor de psicofármacos de la Unión Europea, sólo por detrás de Portugal! (qué curioso que sean también el primer y segundo países con más vacunados).
Cada vez más mujeres (y hombres) son infértiles, los medios oficiales reconocen que el 17% de la población ya es infertil, cuando hace 50 años era el 3%; al margen del efecto de contaminantes en la comida y el agua, una parte se piensa que es por no recibir/otorgar estímulos por parte del sexo opuesto, con lo cual no hay activación hormonal y el aparato reproductor se atrofia.
Hay una caída generalizada de los hijos por mujer en todo el Mundo, lo que en algunos sitios puede no ser malo, pero en España llevamos décadas con valores de 1.3 o peores, lo que unido a que cada vez se tienen hijos más tarde implica que nos estamos extingiendo como pueblo, cultura y país, sólo Portugal, Italia y Grecia están todavía un poco peor (casualidad?), junto a Japón y Corea del Sur, ambos ocupados por EEUU desde la II Guerra Mundial.
Lo anterior lleva a que cada vez se gaste más dinero en mascotas y menos en niños, porque mucha gente sustituye a los hijos y parejas que no tienen por animales de compañía.
España es el primer país europeo en consumo de PROSTITUCIÓN, oficialmente el 39% de los hombres, aunque se da por hecho que las cifras reales son mucho mayores, y por detrás va Suiza con sólo un 19%, donde la prostitución es legal hace décadas y las estadísticas se consideran fiables.
A nivel mundial por delante de España sólo están Tailandia y Puerto Rico, conocidos destinos de turismo sexual, y lo peor de todo es que lejos de reconocer las causas del problema (la destrucción de las relaciones afectivas y el tejido social), lo que hacen es debatir sobre si prohibir sus consecuencias o legalizarlas, algo que en la mayoría de países donde se ha hecho ha resultado ser catastrófico, como yo mismo pude comprobar en Cabo Verde en 2012, con madres prostituyendo a sus hijas y la sociedad en conjunto tratando a las mujeres (a todas) como mero objeto comercial con el beneplácito del Gobierno y sus medios de comunicación.
Más de la mitad de la población padece una o más enfermedades crónicas, algo que se intenta ocultar por todos los medios posibles, de hecho el anterior enlace es de Chile porque desde Europa no es posible encontrar ningún artículo que hable de esa realidad en España, en cambio muestran sólo ese de Chile entre otros que nada tienen que ver con lo buscado para que parezca que eso sólo ocurre lejos, muy lejos, no aquí en "El Paraiso Europeo".
Muchas de esas enfermedades crónicas pueden estar relacionadas con la falta de Amor, con la soledad y la carencia de relaciones humanas verdaderas, el desamor es algo que está comprobado que debilita el sistema inmunitario y la energía del organismo en general.
Así es que en medio de todo esto, ¿a alguien le sorprende que la gente ya no se quiera y se ame como antes?, ¿qué sea casi un milagro ver una relación de pareja basada en sentimientos cálidos y profundos?, sencillamente la hostilidad del entorno lo hace imposible salvo en muy contadas excepciones; al menos esa es mi impresión.
Yo lo que veo por mis consultas es que antes se afrontaba la parte sentimental de la vida con entusiasmo y esperanza, como algo que podía dar frutos y satisfacciones maravillosas, y hoy se encara como algo difícil, peligroso y de dudoso éxito, tanto es así que inconscientemente es fácil limitarse a objetivos superficiales: no esperar mucho para intentar conseguir "un poquito" sin arriesgar demasiado en el proceso.
Pero la cobardía y el Amor son antagónicos, sólo las personas valientes aman de verdad.
Pido disculpas si todo esto resulta demasiado "pesimista", pero pienso que es importante mirar estas realidades de frente para saber donde estamos, y así poder avanzar hacia donde nos gustaría estar; no será fácil, pero sólo mediante la suma de nuestros esfuerzos individuales en el camino del Amor Verdadero conseguiremos salir de este "atolladero colectivo" en el que hemos caído hace ya demasiado tiempo.