Las Cartas de la Vida

A lo largo de este libro se hace un recorrido muy profundo, ameno y lleno de referencias históricas sobre lo que se sabe de las creencias, religión y espiritualidad de los pueblos y culturas que vivieron antes del cristianismo en lo que hoy es Europa.

Incluye también menciones a regiones como Irán, Oriente Medio, el Norte de Africa... llegando incluso a veces a relacionar las creencias de la Europa pre-cristiana con lugares tan alejados como el Continente Americano, Australia o Japón.

Se trata de un libro muy gráfico, lleno de imágenes preciosas de la naturaleza, es más, sólo por las fotografías que contiene ya merece la pena comprarlo.

Yo la primera vez que lo leí no pude evitar ver en él un montón de piezas de un puzzle que conforma una parte fundamental de nuestro pasado colectivo a nivel humano y espiritual.

Pienso que es bueno conocer y entender la esencia del sentir colectivo y espiritual de otros tiempos, para de esa forma poder llegar a tener una espiritualidad y creencias sólidas y verdaderas en el presente, y este libro me parece una herramienta muy útil en ese sentido.

El libro fue editado en 2007, tiene unas 350 páginas y que yo sepa es la última obra de su autor, a quien tuve el placer de conocer en Gijón y me pareció una persona muy sencilla y honesta.

Probablemente el texto más antiguo que la humanidad ha conservado, y es fácil de entender el porque: es un auténtico tesoro de sabiduría.

La idea básica es que todo lo que ocurre en el mundo material tiene una serie de patrones, de tal forma que una situación concreta sólo puede evolucionar de un número reducido de maneras, así pues, si se observa muy bien durante mucho tiempo todo lo que ocurre en el mundo... se pueden llegar a establecer las situaciones arquetípicas y sus posibles evoluciones, de tal manera que cuando estemos en una situación confusa sepamos manejarla mejor gracias a este conocimiento.

Este trabajo de observación lo hizo alguien hace muchos miles de años (se calcula que unos 6000 o más), y dejó por escrito sus conclusiones en este libro, por eso se llama el libro de las mutaciones, porque explica las reglas fijas según las cuales todo cambia y evoluciona en el mundo.

A lo largo de esos 6000 años el libro ha sufrido una infinidad de añadidos, modificaciones, comentarios... de tal manera que lo que se vende hoy en día es el texto que se cree original más todos esos añadidos, dando como resultado un libro de 820 páginas con letra pequeña y no especialmente fácil de leer o entender.

Yo lo leí entero a mediados del 2011, y puedo decir que desde entonces he conseguido varias cosas valiosas gracias a él, y eso que sólo lo entiendo en parte... así pues, lo recomiendo efusivamente, puede ocurrir que lo leas y no lo entiendas, pero si lo entiendes aunque sólo sea una pequeña parte, creeme que te será muy útil.

Hay cientos de versiones diferentes del I-Ching, pero esta es la buena, su autor trabajó en China media vida a principios del siglo XX, hasta llegar a un punto que fue considerado más chino que alemán, tuvo de maestros a algunos de los últimos grandes sabios de la China Imperial, y el trabajo de traducción e investigación que hizo sobre el I-Ching y que está contenido en este libro es algo sencillamente impresionante, la obra de toda una vida.

Las demás versiones están todas basadas en esta, o son una copia de otras versiones, la mayoría intentan hacer más asequible el texto, pero en la práctica sólo consiguen mostrar una interpretación particular de él, en cambio Richard Wilhelm lo que hace es mostrar los textos originales, añadir distintas interpretaciones y comentarios, y dejar que sea el lector el que lo entienda por si mismo, es esta la forma en que se puede llegar a comprender realmente este libro.

La verdadera sabiduría no tiene atajos ;-)

Se trata de una versión resumida del I Ching hecha (aparentemente) por el propio Richard Wilhelm, con la intención de hacer el libro más asequible y ameno.

No tuve ocasión de leerlo, con lo cual no puedo opinar, pero lo cierto es que esta versión tiene sólo 360 páginas, mientras que la anterior tiene 820, y yo que leí entera la versión completa pienso que es muy difícil resumirla tanto sin que pierda una parte muy importante de su contenido.

De todas formas, si encuentras las dos versiones en una librería puedes echarle un vistazo también a esta a ver que te parece, si piensas que con esta entenderás algo y que con la otra no pasarás de la tercera página, pues quizás sea mejor leer esta.

Vamos, que es un libro que se vende como rosquillas, todas las personas que yo conozco que lo compraron (incluido yo mismo), lo volvieron a comprar otra vez para regalárselo a alguien.

El libro en si hace un recorrido por la mayor parte de las tradiciones, simbología y mitos relacionados con los árboles, todo ello aliñado con unas fotos realmente preciosas.

Es un libro que nos hace recordar toda la maravilla y magia que hay en la naturaleza y el mundo que nos rodea, y que por alguna razón tendemos a olvidar una y otra vez.

En resumen, decir que hace un recorrido por la mayor parte de plantas famosas, ya sea por sus propiedades medicinales, por su importancia a nivel simbólico/tradicional o por ambos motivos.

Así pues, este libro también es muy útil como "guía de plantas medicinales"; yo aprecio mucho el que mezcle los mitos y tradiciones de las plantas, con su uso y propiedades medicinales, así como con adivinanzas, historias, leyendas...

Recuerda a aquellos tiempos anteriores al método científico en que ciencia y sentimientos no estaban separados, sino que formaban parte de una misma cosa, antes de que la astrología se convirtiese sólo en astronomía, y la alquimia sólo en química.

Pienso que es un buen libro de consulta y referencia, en el sentido de que recopila muchos datos, nombres e imágenes; pero a la hora de cohesionar toda esta información se queda un poco cojo, es como que el autor no es capaz, o no quiere, sacar ninguna conclusión de todos los datos que aporta.

Pero bueno, aún así pienso que es un libro valioso e interesante, y seguro que el lector despierto será capaz de sacar sus propias conclusiones; "A buen entendedor pocas palabras bastan" que dice el dicho.