Terapia de Realismo - derecho realista

Escrito el 21/Noviembre/2021 por

Dado que estos días se está amenazando a los ciudadanos de Austria e Italia con la creación de leyes para vacunarles contra su voluntad, me pareció oportuno publicar esta entrevista realizada a comienzos de año al juez español Jesús Villegas en la que expone claramente la falta de independencia entre el Poder Judicial y el Poder Político en España, situación extrapolable a muchos otros países y que pienso es clave para entender lo que está pasando.

Sé que es un tema algo árido, pero la entrevista es amena y fácil de seguir, y pienso que merece la pena porque, nos guste o no, el actual Estado de Derecho es una de las pocas defensas que tenemos frente a los disparates de quienes realmente manejan los hilos del poder en las sombras.

Así pues, primero pongo el vídeo con la entrevista, y a continuación el resumen de las ideas más relevantes y mis conclusiones:

En líneas generales viene a decir que en los asuntos relevantes para el Poder Político, el Poder Judicial está supeditado a este y carece de independencia:

El problema no está en los jueces individuales, está en el sistema, en la estructura que está montada para politizar la Justicia y controlar a los jueces

(0:47)

Hay un tóxico en el aire [del Sistema Judicial] que es la contaminación política, y en las altas esferas la influencia de la política se siente mucho, mientras que en la base muy poco, a medida que vas subiendo el sistema se va contaminando

(1:24)

El ejemplo más claro sería el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) que es elegido al 100% por los políticos, y tiene poder, entre otras cosas, para suspender de empleo y sueldo a cualquier magistrado, con lo cual si un juez está investigando un presunto delito de un político, este político puede haber elegido a uno o más miembros del CGPJ y a través de ellos influir en el juez.

Esto lo explica a partir del minuto 1:42:

[Lo lógico sería] que haya un equilibrio, que parte del CGPJ lo elijan los jueces y parte los políticos

(2:37)

...con lo cual hay una sintonía entre poderes [político y judicial] que lo que hace es destruir la separación, convertirlo todo en una farsa

(3:09)

...en la práctica lo que va a ocurrir es que el Presidente del Gobierno me puede suspender a mi [el juez] de empleo y sueldo

(3:48)

Para colmo, los jueces del Tribunal Supremo son elegidos por el CGPJ:

Pero es que también el CGPJ elige a los magistrados del Tribunal Supremo [...] y las decisiones que emiten los jueces que están en la jerarquía [judicial] en una posición inferior [...] pueden ser revocadas por el Tribunal Supremo

(4:37)

Entonces vemos que el sistema [judicial] se monta como con una trampa, con un truco, para que al final todo quede en manos de los mismos

(5:20)

El centro de decisión [del Poder Judicial] es siempre el mismo: la política

(6:21)

Por otro lado, los magistrados del Tribunal Constitucional a parte de ser también elegidos por el Poder Político, ni siquiera son jueces, y a pesar de ello pueden tomar decisiones judiciales en lo referente a procesos particulares de los ciudadanos:

El Tribunal Constitucional tiene rito judicial, es decir, son unos señores a quienes se les llama magistrados, llevan togas [...] pero no son jueces, [...] no pertenece al Poder Judicial; es un órgano de composición eminentemente política

(6:45)

Lo que es realmente inaceptable es que el Tribunal Constitucional pueda resolver los recursos de amparo que presentan los ciudadanos, [...] y no se puede confiar para [ello] en unos señores [...] que no son jueces y que dependen por completo de la política

(7:28)

Evidentemente el Tribunal Constitucional está mucho más politizado que el Tribunal Supremo, y de verdad que lo digo con dolor: algunas de las decisiones que han tomado han sido escandalosas

(en relación al caso Rumasa y la Ley de Violencia de Género - 8:43)

Es un espectáculo muy triste el que nos da el Tribunal Constitucional

(9:40)

Y ya la guinda en el pastel es la Fiscalía:

La estructura de la Fiscalía en España está militarizada, tiene un fiscal general y a partir de ahí hay [...] una estructura piramidal [de tal forma que] el Fiscal General del Estado puede darle órdenes a cualquier [fiscal] en cualquier parte del territorio nacional

(10:28)

Si hay un fiscal que está investigando un delito en un remoto pueblo [...] el Fiscal General del Estado le puede remover el caso, le puede quitar, le puede echar, le puede dar instrucciones concretas, le puede retirar el expediente y pasárselo a otro, le puede llevar a su despacho, es decir, se trata de una estructura totalmente militarizada que es incompatible con la búsqueda de la verdad y la averiguación del delito

(10:54)

La propuesta del Gobierno supone acercar la investigación criminal a la política [...] y esto en si mismo es algo rechazable; para averiguar el delito [...] la política no tiene nada que ver: NADA

(11:45)

La política no tiene nada que ver con la investigación criminal, si las mezclamos lo que conseguimos es simplemente una burla, una farsa de la Justicia

(12:22)

Justicia maltratada por el Poder Político

Creo que el magistrado Villegas explica muy bien la situación, pero según yo lo veo el problema no es sólo que el Poder Judicial esté controlado por un puñado de políticos, sino que a su vez estos son controlados por quienes financian al Estado, teniendo estos últimos la capacidad de coaccionarlo, o incluso destruirlo, simplemente cerrando el grifo del dinero.

Y esta situación, con distintas particularidades, viene a ser la misma en la mayoría de países, con lo cual en la práctica en el Mundo mandan un puñado de personas que controlan el Sistema Financiero y a través de este los Estados y los medios de producción, es decir, una concentración de poder brutal y monstruosa, como no se ha conocido nunca en la Historia, y de la que obviamente no puede salir nada bueno.

Es más, estoy convencido de que ese puñado de personas que controlan el Mundo no son sino "marionetas" de entidades psíquicas cuyo único objetivo es destruir el planeta y la humanidad, aunque no es ahora el momento de profundizar en ello.

La cuestión es que ese poder global en la sombra no está intentando sólo inyectarnos un producto químico contra nuestra voluntad, sino que con ello está intentando destruir nuestros Estados de Derecho, que soy el primero en reconocer que están plagados de defectos y atrocidades como demuestran siglos de Historia, pero aún así son menos malos que una tiranía sin límites donde un puñado de dementes impongan su voluntad al resto del planeta sin ningún tipo de límite ni control.

Por eso, que el Estado de Derecho rechace la vacunación forzosa de la población, no implica sólo el conservar nuestros derechos individuales sobre nuestra salud y nuestro cuerpo, sino también una victoria decisiva y necesaria de nuestra civilización contra la tiranía y arrogancia de unos dementes a quien nadie ha votado y que ni siquiera se dignan a dar la cara.

Lo contrario, el que consiguieran forzar a las personas a vacunarse, sería una derrota total e irreversible del Estado, ya que este habría fracasado en lo más esencial: proteger la dignidad e integridad física de sus ciudadanos contra las agresiones de sus enemigos, que precisamente lo que buscan en este caso no es ni más ni menos que destruir las estructuras de poder existentes para poder ser dueños y señores sin límites de todo lo habido y por haber, incluso de los cuerpos y la salud de las personas.

 

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01/Dec/2021 Gestos dice:

Estimado Gallego, Su supesto de partida es casi correcto. Asumiré que ambos vemos a el pueblo y la masa como sinónimos. Aunque no lo sean. En efecto, el político es reflejo del pueblo. Pero, Arendt definió a la masa como 'aquella gente que no está integrada dentro de una organización basada en intereses comunes';  en ese sentido los políticos no surgen de la masa, porque en su mayoría tienen, como mínimo, vasta trayectoria correligionaria, es decir que para optar a un cargo público, antes debieron integrarse a una organización con fines políticos. A los veinte años aún defendía el supuesto que usted me atribuye: la gente es buena, los políticos son malos; mas, leer a Santiago Castro-Gómez me sacó del error. No existe la 'eticidad sustancialista' de un grupo humano específico. En ese mismo período leí la obra de Károli Kerényi, a quien admiro por su visión sobre cómo las etimologías orientan determinadas mitologías, las que a su vez son parasitadas desde la política. Él señaló el uso retorcido que el nazismo estaba haciendo de las mitologías. Dicho lo anterior, hoy cabe decir que el supuesto del que parto es que la libertad es alcanzable, pero ello exige enfrentarse a la propia psique, ese lugar donde lo inmanente (racional e irracional) y lo trascendente deben cooperar para vivir libres en el mundo. El idiota vendría a ser, etimológicamente, aquel que mira el pensamiento del político (autoritario, sumario, opaco, que barema con sesgo, etc.), como uno opuesto a la libertad. La psique del político tiene muchas más capas de falso pavón, que la de la masa; ya que solo la oscurece sin evitar que se corroa. Las políticas públicas deberían orientarse a fomentar la felicidad de las familias. Ahora bien, la falta de compromiso cívico que usted señala, no se justifica por el hecho de que las políticas no den pie con bola con la felicidad del pueblo, mas sí pienso que su indiferencia cívica radica en que percibe, confusamente, que el político coarta su libertad.

01/Dec/2021 Gestas dice:

Hasta que decline el estado, la masa no se verá forzada a recuperar su libertad.

30/Nov/2021 gallego dice:

Estimado Gestas, mucho me temo que partimos de supuestos de partida diferentes. Tengo la impresión para usted de la gente de a pie y los políticos son especies distintas; los primeros son inocentes y buenos y los segundos, ni inocentes ni buenos. Mi supuesto de partida es diferente: los políticos son un reflejo del pueblo del que han salido. Hace cosa de un año vivía en una casa en el campo. Una rotura en la tubería que me suministraba agua hizo que llamase a un fontanero para que hiciese la reparación oportuna. Terminada ésta, me dijo por un pequeña cantidad de dinero adicional podría instalar junto al contador de agua un dispositivo que lo engañaría, de forma que el contador diese unas mediciones menores que el consumo real de agua. Viendo mi reticencia, el fontanero añadió que buena parte de mis vecinos tenían ese dispositivo instalado. Ese es un ejemplo de la enorme estupidez que reina en España, caso que conozco por ser español. Queremos, por ejemplo, servicios públicos de calidad pero en cuanto tenemos ocasión una mayoría abusa de ellos. Los políticos con su corrupción, con sus ansias totalitarias y demás vicios no salen de la nada, sino que son un reflejo del ciudadano de a pie.

28/Nov/2021 Gestas dice:

Estimado Gallego, La democracia está subyugada a los criterios de la política real. La salida cínica de los políticos realistas, para justificar sus empeños de poder, consiste en decir que la ética no es la política. Y tienen razón. Parto de esto para decirle que la pérdida del equilibrio de poderes (que usted enfoca desde la óptica de la falta de independencia judicial), NO requiere como condición la existencia de una masa de idiotas. Es la política la causa del desequilibrio de poderes, el que a su vez actúa como agar nutritivo dentro del cual crece la masa. La etimología de la palabra idiota que sugiere, fue planteada durante el siglo XIX, pero, en los siglos previos a ése, así como en éste, se propone que idiota era el ciudadano privado, en oposición al ciudadano que ocupaba un puesto en la polis, o sea, un oficial político (acuérdese que la polis griega es la forma de organización social que precede al estado: es un pre-estado). Dostoevsky escribió El Idiota, y hacerlo fue, para él, una enorme satisfacción literaria. Parte de su vivencia epiléptica, o de las muchas capas que la componen, intentó reflejarla en su comprensión de la idiotez con que se adjetiva al principe Myskhin. Gallego, ya en las mismas reflexiones privadas que sostuvo Dostoevsky sobre este libro, lanzó su mirada hacia los idiotas en la grecia clásica y vió en ellos un reflejo de esa inocencia ejemplar que él aupó en la figura de Myskhin. Como anarquista, yo preferiría estar rodeado de aquel tipo de idiotas que de políticos, sean estos antiguos o modernos. El problema es el estado, no la masa. Las masas están precarizadas y fumigadas con propaganda, pero no son idiotas, ni peyorativa ni etimológicamente hablando. Si ha leído El Idiota, Gallego, pues no me dejará mentir al decir que el principe Myskhin entendía que la gente lo tildaba de idiota (en su sentido más insultante), pero, a la vez, asumía que su inocencia privada era el camino correcto, y no el de los políticos. Un saludo

28/Nov/2021 gallego dice:

Hay otro problema, que no es otro que existe una enorme cantidad de gente idiota. Idiota en el sentido etimológico [1], "aquel que no se preocupa de los asuntos públicos, sino sólo de sus intereses privados". Para que tan escandalosa - y muy peligrosa para nuestros derechos y libertades - falta de independencia judicial se dé, es condición necesaria la existencia de una gran masa de idiotas - de centro, de derechas, de izquierdas, apolíticos - cuya falta de preocupación por este y otros asuntos deje hacer a los políticos. [1] http://etimologias.dechile.net/?idiota

Nacho responde:

Lo que dices es una gran verdad, es sólo gracias a la indiferencia y pasividad de la mayoría que las cosas han llegado al punto en que están.

Da miedo, y cuando hablas con la gente todavía más, muchas personas en el fondo barruntan que es lo que ocurre pero sólo se preocupan de su bienestar a corto plazo, y a menudo se conforman con tener algo que llevarse a la boca y una televisión con la que evadirse de la realidad; "pan y circo" que dirían los Romanos.

28/Nov/2021 Ana dice:

Buenos días. Desde mi pequeño y concreto punto de vista, al margen de la politización por parte de los poderes económicos que ha existido, existe y existirá de todas las estructuras que gobiernan el planeta, no tengo un criterio claro en relación al macro debate de los negacionistas de la utilidad de las vacunas y de los defensores de la utilidad de las mismas. Lo que sí tengo, es una duda que no consigo satisfacer. ¿Cómo se explica la erradicación de la viruela, o el descenso de enfermedades como el sarampión, la poliomielitis, tosferina, difteria, tétanos, sarampión, rubéola,varicela, etc., que a estas alturas de la historia se justifica gracias a la vacunación de la mayoría de la población? Como os decía, no tengo argumentos ni a favor ni encontra de los unos y los otros. Lo que sí parece real es que las personas vacunadas, en general, necesitan menos atención sanitaria; por lo tanto, desde mi punto de vista, esa es una buena razón para vacunarse, ya que a lo largo de este año y mucho, que llevamos sufriendo esta situación, no solo han muerto las personas a consecuencia de la COVID-19 y sus mutaciones, sino que también, otras muchas que no han podido acceder a los servicios de salud por estar colapsados por los enfermos de la COVID-19. Como dos decía, aunque nada más sea para evitar el colapso de los servicios sanitarios, desde mi punto de vista, ya es una buena razón para vacunarse. Un saludo y feliz domingo.

Nacho responde:

Me temo Ana que todo eso que comentas sobre "negacionistas", "antivacunas" y "debates" a favor o en contra de las vacunas no son sino creaciones de los medios de comunicación, que no se corresponden con la realidad y cuyo objetivo es crear confusión y evitar que la gente cuestione los aspectos clave del problema.

A estas alturas nadie niega el "problema del Covid", lo que hay son distintas opiniones o teorías a nivel técnico, generalmente expresadas por médicos o científicos, y está claro que el poder establecido presenta una de esas "versiones" como válida e incuestionable, mientras que las otras las censura y criminaliza, algo que recuerda a la Santa Inquisición en sus peores momentos, y que obviamente es un problema político.

Nadie, o casi nadie, cuestiona las vacunas tradicionales, lo que ocurre es que las llamadas "vacunas de Covid" usan una tecnología totalmente diferente, experimental, con posibles efectos adversos muy graves y para colmo con dudosa efectividad; en otras palabras, que tienen de "vacunas" el nombre y poco más. Por eso la gente desconfía de ellas y se niega a ponérselas, por una cuestión de prudencia que no tiene nada que ver con ser "antivacunas".

Y el resultado neto de esta situación es una perdida de credibilidad brutal del Aparato Sanitario del Estado, de tal forma que muchísima gente ha dejado de ir al médico a revisiones y/o han dejado de vacunar a sus hijos con vacunas tradicionales, sencillamente porque ahora ven al médico y la enfermera como meros ejecutores de órdenes del Estado y no como profesionales que velan por cuidar la salud de sus pacientes.

Lo de que "las personas más vacunadas necesiten menos servicios sanitarios", no dispongo de estadísticas oficiales al respecto, pero lo que he visto a lo largo de los últimos 20 años en mi entorno es justamente lo contrario.

26/Nov/2021 Gestas dice:

Hola, Soy biofísico de profesión, con una formación mínima en farmacología, pero con ninguna competencia o pericia en el área de vacunas. Por eso con respecto al tema de la eficacia de las vacunas, prefiero decir: "zapatero a tus zapatos". Dicho esto, pues respetuosamente quiero mencionarle a Ana, que Amparo acierta en relación al PUNTO ESPECÍFICO que ella señala en su comentario, cuando nos dice que: es un engaño que "la carga viral es mayor en no vacunados". Este artículo se publicó hace menos de un mes, pero solo confirma lo que otros estudios han publicado al mismo respecto: https://www.thelancet.com/journals/laninf/article/PIIS1473-3099(21)00648-4/fulltext Uno de los puntos que confirma el estudio, es, que el pico de carga viral, técnicamente, es el mismo tanto para los no vacunados, como para los que tienen un cuadro completo de vacunación. Vaya que "ha corrido agua bajo el puente" desde que comenzó la pandemia. Se ha escrito tanto tanto tanto, solo desde el ámbito científico con relación a este virus (sin olvidar que, perspectivas científicas correctas sobre su naturaleza fueron catalogadas de conspiranóicas desde el poder), que tengo claro como se fueron cargando los dados para decantarse por la inoculación como el paradigma para salir de esta crisis sanitaria. En todo caso, comparto con Ana que debe ser el amor y el respeto lo que debe primar a la hora de enfrentar las posturas profilácticas, curativas o de control de daños con relación al covid, de nuestros semejantes, siempre que, eso sí, se basen en hechos. Saludos.

Nacho responde:

Muchas gracias por tu aportación Gestas.

Efectivamente hay que basarse en hechos probados para asuntos tan serios como este.

Según yo lo veo, no es sólo el Poder Judicial que carece de independencia, sino que ocurre lo mismo con los profesionales sanitarios y la ciencia en general, al final lo que tenemos es un puñado de canallas usando a unos y a otros para conseguir unos fines egoistas y nada claros.

Ojalá que esta situación cambie a mejor pronto, porque de lo contrario vamos directos al desastre.

24/Nov/2021 Ana dice:

Estimados: Si la evidencia no es suficiente, pues se descarta. Así que Amparo, o a quien quiera, estoy muy interesada en leer sobre los cuestionamientos de la teoría vírica. Agradecería que compartieran algunos enlaces. Por cierto, me da igual estar cerca de no vacunados. Nadie le anda pidiendo comprobantes de vacuna a otro en el transporte público (y por acá van bien llenos). No es miedo. Es amor/respeto al otro. No quiero ser yo el organismo en el que mute el bicho y se vuelva súper resistente (y podría serlo, ya que hasta como pan con moho =P). Aquí lo que tiene que primar es eso, el amor y el respeto. Claramente al hacer obligatorio algo lo que hacen es no respetar tu libertad (y en último término uno debe tener la libertad de morirse si quiere). Lo que no deja de causarme extrañeza es los estén obligando, siendo que se supone que en general los estados europeos son mucho más liberales. Lo digo porque aquí en Chile todos los planes de vacunación (todos los tipos, no solo para Covid) son voluntarios. Por eso, sí, desde luego que es político. O más bien "poderoso caballero es don Dinero".

24/Nov/2021 damian dice:

Muchas Gracias, un Saludo.

24/Nov/2021 Amparo dice:

Leyendo algunos comentarios, sobre todo el último de Ana, veo que a la mayoría "la ciencia" os tiene engañados con eso de que "la carga viral es mayor en no vacunados". Flagrante mentira. La teoría vírica está muy puesta en cuestión últimamente, eso para empezar, pero aún asumiendo estos postulados clásicos, la carga viral sería mayor en una persona ENFERMA. Si yo no me vacuno pero estoy sana y mi sistema inmune tolera bien la enfermedad, no soy un problema para nadie. O sea, todos esos vacunados miedosos, sencillamente que no se junten con personas VISIBLEMENTE enfermas (carga viral alta), aunque si tanto confían en su vacuna les debería dar igual. Las personas no somos "máquinas de matar asintomáticas". Llevamos miles de años conviviendo unos con otros y jamás se vio el caso de que un niño inocente y aparentemente sano contagiar a una enfermedad mortal a sus pobres abuelitos. Jamás. Por favor, despierten...

Nacho responde:

Muchas gracias Amparo, has contestado el mensaje de Ana mucho mejor que yo y con menos palabras.

Yo pienso que quienes a estas alturas no ven lo que está ocurriendo es simplemente porque las implicaciones de esa dolorosa realidad les rompen sus esquemas de tal manera que inconscientemente necesitan aferrarse a cualquier mentira para no colapsar psicologicamente.

Ojalá que todo este despropósito termine pronto, porque de lo contrario va a acabar medio planeta desquiciado.

24/Nov/2021 Gestas dice:

A propósito de poderosos de la historia del estado, me viene a la mente la figura del zar Boris Godunov, tanto el representado por Pushkin como el escudriñado por los historiadores. Buscó el poder como pocos, pero al final aceptó su futilidad, precisamente porque comprendió que en la posesión del poder uno queda reducido a una mera vasija que canaliza solo fuerzas impersonales, propias y extrañas.

24/Nov/2021 Gestas dice:

Lo individual, lo social y lo macrosocial, pueden observarse desde varias perspectivas, dos de ellas son la anarquía y el estado.  Ambas categorías han pervivido y coexistido en la teoría y la práctica durante mucho tiempo. Con las dos pueden elaborarse caricaturas grotescas o estructuras con fondo y forma sólidas. A la vez, los estados han sido mucho más frecuentes que las anarquías. No puede hablarse del estado sin antes hacerlo sobre la teoría del estado. No sé si hay unanimidad entre los teóricos del estado acerca del elemento central que define un estado, pero, percibo a grandes rasgos que este es, el poder, o sea, la capacidad actual y potencial de imponer regularmente la voluntad del estado sobre los ciudadanos. Pero, entonces, ¿quién es el estado? Para efectos concretos, no ideales, el estado lo componen los gobernantes nacionales. Y estos gobernantes, ¿quienes son? Pues, los que logran subornidar a los otros poderes del estado. Esta es la historia de la humanidad: el poder soberano siempre buscará ser detentado por un pequeño grupo, que en su paroxismo rezuma en un solo individuo. En este contexto el Estado de Derecho jamás fungirá como esa entidad superordinada capaz de garantizar el equilibrio entre los distintos actores e imperativos de ley dentro de una nación. Yo no llamaría politización del derecho al fenómeno que catacteriza a nuestros sistemas, más o menos democráticos, sino que sencillamente es el abuso del derecho por parte del poder soberano. A mi juicio solo la anarquía sabia es capaz de invertir las bases de criterio epistemológico que alimentan la panacea del estado de derecho como garante del equilibrio entre los poderes nacionales. Un profesor solía decirnos: 'El estado somos todos, solo que unos pocos, o cosas, siempre serán más estado que el resto'. La vacunación obligatoria es un simple acto de poder del estado, cuando en cambio debería ser, un estado de poder.

23/Nov/2021 Ana dice:

Hola, Nacho. Lo que plantea Antonio no es absurdo. Sucede que el virus muta, y si no estás vacunado tienes más carga viral (si estás vacunado no es que no te entren virus, sino que no se reproducen tanto porque son neutralizados por las defensas) y si hay más virus, hay más posibilidades de que mute en ti y se vaya a otra persona con esa nueva mutación, que puede ser más poderosa (lo que pasó con la variante Delta). Así que por eso te llaman a vacunarte. No por ti. Es para evitar la propagación y mutación. Lógico que si vives solo no tiene sentido que te vacunes. Esta no es la única enfermedad que se comporta así. Todos los años vacunan contra la influenza porque siempre hay una variante nueva (bueno, acá en Chile, no sé cómo será por allá. De todas formas es voluntario). No estaba muy segura de escribir, pero cuando leo noticias internacionales, y trato de ver cómo se aplica eso a Chile me doy cuenta de que hay cosas que no calzan. Porque acá compraron vacunas de todas partes (versiones con ARNm y vacunas clásicas, europeas y chinas), y si quisieran que todos tuviéramos lo mismo inyectado no nos hubieran vacunado con tan distintas versiones. Lo que sí puedo concluir es que los laboratorios se están llevando mucho dinero. En Chile, al menos, sí está correlacionada la disminución de contagios y hospitalizados con la vacunación. Sobre los países que lo están pasando peor con la enfermedad, hay que ver relaciones con otras enfermedades (poblaciones con mayor sobrepeso/enfermedades cardiacas/tabaquismo suelen pasarlo peor). En otras palabras, que te vacunes o no solo es asunto tuyo si estás aislado. Si estás en una comunidad es un asunto comunitario. Aún así, la vacuna no puede ser obligatoria. Pero tú tampoco puedes obligar a que te acepten en cualquier parte si no estás vacunado, al igual que no es aceptable que fumes en cualquier lado. Solo es un asunto de sanidad.

Nacho responde:

Gracias por tu aporte Ana, entiendo la idea que intentas transmitir.

El problema es que hay una falta total de credibilidad y legitimidad por parte de la sanidad oficial, es obvio que esta es sólo un apéndice del Poder Político, que a su vez depende del Poder Financiero que controla las farmacéuticas y los medios de comunicación.

Eso lleva a que los profesionales sanitarios no puedan actuar según sus conocimientos, criterio y experiencia, sino que forzosamente tienen que hacer y decir lo que les manda el Poder Político, quienes no lo hacen así son expulsados de su trabajo, perseguidos, censurados e incluso humillados públicamente; esto con la pandemia se ha visto más claro que nunca, pero es un problema que viene de atrás.

En los 17 años que llevo atendiendo consultas de tarot he tratado con muchas enfermeras, y en privado reconocen abiertamente que muchos de los protocolos que aplican y medicamentos que recetan son inútiles o incluso dañinos, pero no tienen libertad para decirlo ni mucho menos para hacer las cosas de una manera diferente; de hecho, en su vida privada a menudo usan protocolos y remedios totalmente diferentes a los oficiales porque saben que son más efectivos y menos dañinos.

Conozco incluso un médico de familia que habrá puesto decenas de miles de vacunas a los hijos de sus pacientes, pero sus dos hijas que tienen ya unos 30 años y una salud perfecta jamás se pusieron una vacuna.

Entonces, que haya que marginar y arruinar la vida a los no vacunados porque quienes fabrican las vacunas digan que contagian más el virus, es inaceptable porque no es posible saber si eso que dicen es cierto o una mentira para conseguir sus fines políticos; es obvio que son juez y parte al mismo tiempo.

Y como los médicos no tienen libertad para disentir, ni los medios de comunicación para transmitir su mensaje, ni el Poder Judicial para averiguar la verdad y depurar responsabilidades, pues sería inaceptable que cada persona no tuviese libertad ni siquiera para negarse a que le inyecten una sustancia química desconocida cuyos fabricantes han conseguido impunidad judicial en caso de que cause efectos nocivos.

Por otro lado, el comparar la prohibición de fumar en ciertos espacios con la obligatoriedad de estar vacunado para acceder a ellos, se cae por su propio peso, ya que estás comparando el dejar de hacer algo innecesario durante unas pocas horas con tener que hacer algo permanente, irreversible y con posibles consecuencias catastróficas sobre tu salud de las que nadie se hace responsable.

En definitiva, que la raíz del problema es político, concretamente que hay ciertos grupos de poder usando a los gobiernos y sus aparatos sanitarios con fines nada claros, pero que los hechos indican que van claramente en contra del bien común y el orden establecido.

23/Nov/2021 Ramón dice:

Parece que te han oído ;-) El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco tumba el Pasaporte Covid: https://www.youtube.com/watch?v=TMs21ZcRdeg Aquí el auto de la sentencia: https://www.noticiasdealava.eus/elementosWeb/gestionCajas/MMP/File/2021//ZZZ_973-2021_Auto_22-11-21_Resolutivo_(EUDOC022524821).PDF

Nacho responde:

Me alegro mucho, sin duda es un paso en la dirección correcta.

23/Nov/2021 Antonio dice:

En general estoy de acuerdo contigo, quien no quiera vacunarse que no se vacune, y quien se haya vacunado no debe tener "miedo" de los no vacunados, pues en teoría no debería afectarle en nada. En cuanto al poder de los jueces pienso muy diferente a lo que dices porque los jueces, en general, en nuestro país están muy, muy, muy escorados a la derecha, muy a la derecha, no son justos, son totalmente parciales, lo podemos ver a cada instante, y de eso no tiene culpa el gobierno actual, obviamente. Saludos.

Nacho responde:

Claro, obviamente a parte de tener libertad e independencia los jueces deben juzgar según la Ley, no según sus convicciones ideológicas personales; sobre como de parciales o imparciales sean los jueces en España no digo nada porque no es un tema que conozca, pero obviamente antes de poder ser imparciales necesitan tener independencia del Poder Político.

22/Nov/2021 Antonio dice:

Sé que en general tienes razón, Nacho, pero creo que "la verdad" tampoco la saben los más altos cargos de las instituciones de nuestro país, por lo que como comentaba antes, la gran deriva en la toma de decisiones ha ocurrido por ese desconocimiento de "la verdad", todo son conjeturas, suposiciones, creencias, unos científicos dicen una cosa y otros dicen lo contrario, etc. Con esto quiero decir que no creo que nuestro gobierno, los jueces, los que están más arriba y los que mandan desde más arriba todavía, sepan esa "verdad" y que han actuado más con fines partidistas que pensando en el bien general de la población. Quizás, y digo "quizás", el único que ha intentado hacer algo, se haya equivocado o no, ha sido el gobierno, que ha estado siendo atacado por todos lados, ya sean esos jueces, los grandes empresarios, seguramente "mandamases" de otros países de la unión europea, etc. y que han hecho lo que han podido, lo que le han dejado, o lo que han pensado que era menos malo. Imagino, aunque me llamen conspiranóico, que todo esto ha sido un test, una prueba a nivel mundial, y el culpable no creo que haya salido de China, sino de un país que está justo entre el oriente de China y el occidente nuestro. Aparte de eso, tal y como dices, lo "normal" es que a alguien vacunado no debería afectarle, con este virus en lugar de no afectar parece que lo que hace es que afecte menos en algunos casos y en otros no, eso demuestra que la vacuna no es tan efectiva, pues si fuese una "verdadera vacuna" no afectaría en nada al vacunado. Hay muchos interrogantes, cierto, dudo que jamás sabremos la verdad. Y es el motivo por el que, en este caso, he preferido vacunarme, simplemente por si acaso me ataca el virus, al menos en teoría la defensa ayudará en algo. Repito, en teoría, porque las estadísticas dicen que el 60% de hospitalizados actualmente no están vacunados (será una cifra redonda, 5x% seguramente), y eso dice poco en favor de la vacuna, salvo que disminuye los efectos.

Nacho responde:

Yo no he dicho que "los jueces" sepan "la verdad" sobre el Covid, sino que tienen los medios y la autoridad para intentar encontrarla y poner en su sitio a quien pueda haber cometido crímenes relacionados con ello; no lo hacen porque no tienen la independencia y libertad que deberían de tener, ese es el problema.

En cuanto al Gobierno de España, obviamente tiene un margen de maniobra muy limitado al igual que el resto de países sin armamento nuclear, está claro que se limitan a hacer lo que les ordena no se sabe quien y dar la cara en los medios de comunicación; el problema es que por ese camino nos quedaremos sin país en muy poco tiempo, de hecho el deterioro en los últimos 20 años ha sido más que notable.

Lo de la vacuna, me parece muy bien que quien quiera se vacune, lo que no es aceptable es que se criminalice a quienes deciden no vacunarse, ni muchos menos que se les prive de empleo y sueldo como está ocurriendo en Italia, o que se amenace a la gente con vacunarles por la fuerza; ese tipo de cosas no tienen lugar en un país civilizado.

Quienes promueven ese odio y marginación están atentando contra el propio Estado, y si el Poder Judicial tuviese más libertad e independencia probablemente tomase cartas en el asunto para poner límites a esa situación.

22/Nov/2021 Antonio dice:

Y pensando en otras obligaciones, por qué hay que llevar caso para ir moto, incluso ahora será obligatorio guantes, querían poner obligatorio chaquetas con airbag, botas, etc. Dicen que para que la seguridad social no tenga que hacerse cargo de los heridos en accidentes, pero visto así que también obliguen a los coches ir con casco además del cinturón, y que todos los vehículos no pasen de 10 km/h y seguro que se reducen las muertes. Y qué te voy a contar sobre las embarcaciones de recreo y el acoso de normas, reglas, leyes, obligaciones, permisos, revisiones, etc. que la mayoría de gente prefiere abanderar en otros países para librarse del acoso administrativo español. Si hasta para ir en bici o patinete quiren poner, si no lo han puesto ya, obligatorio casco, seguro, cursos, etc. Eso sí, luego los "descendientes y amigos de otras épocas" hacen lo que les da la gana, se saltan las leyes y nunca les pasa nada. Pero si eres alguien "normal" toda el peso de la ley te cae encima y no puedes hacer nada.

22/Nov/2021 Gerardo dice:

Hola Nacho !!! Interesante !!! Sin duda la independencia de la justicia es indicio de instituciones confiables : todo ciudadano debe tener el derecho a un juicio justo y a la mejor defensa. Se puede obligar a la gente a que se vacune ? Si y nó : Si si estuviera probado 100% que la vacuna disminuye el riesgo de padecer y contagiar cualquier enfermedad. En ese caso los que no quieren vacunarse estarían poniendo en riesgo su salud y la de su prójimo.Podría pensarse idealmente en 1 mundo aislado de los vacunados y otro idem de los no vacunados.Acá en argentina NO ES OBLIGATORIO vacunarse, si bién el gobierno hace campaña a favor... Es un derecho decidir sobre mi cuerpo ? por supuesto , siempre que no afecte a otras personas.Abrazo .

Nacho responde:

Gracias por tu comentario Gerardo, como decía antes, la definición de vacuna implica que protege a quien la usa (si la vacuna funciona), por eso no tiene sentido obligar a vacunarse a una persona para proteger a otra, lo contrario sería reconocer implícitamente que la vacuna o no funciona o lo hace de manera muy deficiente.

Si tanto les preocupa a quienes mandan la salud de la gente deberían empezar por reducir las causas de otras enfermedades como cáncer, diabetes, enfermedades mentales, trastornos metabólicos, alergias, etcétera.

22/Nov/2021 Alfredo dice:

¡Excelente artículo!, sin división de poderes lo que tenemos es una dictadura disfrazada de democracia. Como dice el juez en la entrevista del video: –deberíamos aclarar qué modelo es el que queremos. La verdad es que el pueblo en España nunca ha decidido nada, todo se lo han dado ya cocinado desde unos poderes fácticos que aspiran a perpetuarse utilizando la manipulación del subconsciente colectivo como explicaste en tu artículo anterior sobre ""las marionetas de entidades psíquicas"" Solución: decir NO a todo lo que sintamos como un error grave de pensamiento.

22/Nov/2021 Antonio dice:

Si pensamos en este virus actual que estamos sufriendo, ¿es necesario obligar la vacunación a todo el mundo? Pues no debería ser necesaria la obligación, pero sí pienso que todos deberíamos vacunarnos voluntariamente. Y no me cuenten historias conspiranóicas sobre la vacuna, de chips y chorradas de esas, todos sabemos realmente que eso son tonterías. Pero de todas formas, a lo que iba, los gobiernos de los distintos países ven que hay muchos contagios, que los hospitales se saturan, que la gente muere, ¿qué deben hacer? Ellos acertadamente o no, con razón o sin ella, con su desconocimiento, obvio, sobre el tema, y dejándose aconsejar por expertos de la sanidad, ¿qué deben hacer? ¿aconsejan precaución en los contactos con los demás? ¿aconsejan la vacunación? Si hay millones de personas que no se han vacunado, ¿los dejan que sigan contagiando y matando a otras personas? ¿los obliga a vacunarse? o mejor "pasan" del tema y piensan: "mira, ya estoy harto y la gente no hace caso y además me ponen a parir, así que ahora que cada uno haga lo que quiera y se se quieren morir y matar a los demás, que hagan lo que les parezca, al final quedaremos menos". Pues eso, ¿cuál es la solución "buena"? Yo creo que ponerse una vacuna no es nada malo, todos estamos vacunados de muchas cosas, pues esta es una más, que puede que nos ayude en caso de contagio o puede que no, pero siempre ayudará en reducir su peligrosidad. Es mi opinión, nada más.

Nacho responde:

Como decía antes, las vacunas por definición protegen a quien las usa (si funcionan), con lo cual quien no quiera vacunarse asume un riesgo a nivel individual, similar a quien fuma, bebe en exceso o tiene una alimentación desequilibrada.

Por tanto, al igual que no se prohíbe el tabaco, el alcohol o la comida basura para proteger la salud de la gente, tampoco tiene sentido obligar a nadie a vacunarse para "salvarle la vida".

Que la vacuna del Covid no es "una vacuna más" es obvio, no sé como puedes decir lo contrario.

Y que conste que yo no tengo nada contra las vacunas en general, sólo contra la administración forzosa de estas, o cualquier tratamiento médico, contra la voluntad de la persona, lo cual es un derecho básico reconocido por la legislación internacional, desde la Convención de Ginebra al Protocolo de Nuremberg pasando por la Constitución de cualquier país minimamente civilizado.

La solución "buena" sería que el Poder Judicial tomase cartas en el asunto con el apoyo de las Fuerzas Armadas, sacara a la luz la verdad de toda esta historia del Covid y cayese con todo el peso de la Ley y las Instituciones del Estado de Derecho sobre los culpables de semejante desastre.

La realidad es que el país está siendo atacado, y es el Poder Judicial con el apoyo de las Fuerzas Armadas quien tiene los medios y la autoridad para defenderlo.

22/Nov/2021 Antonio dice:

¡¡¡Ufff...!!! tema complejo. El asunto de la politización de la justicia es muy grave, seguimos teniendo unos estamentos judiciales que provienen de la dictadura franquista, una gran gran cantidad de jueces son totalmente imparciales, favoreciendo a "los suyos", herederos del dictador Franco, y están en Vox, el PP y en los "viejos" (y no tan viejos) del PSOE. De todas formas, aunque todo está relacionado, no hay que mezclar el tema de la imparcialidad de la justicia, y las vacunas, no tienen nada que ver. El tema del dichoso virus que estamos sufriendo es algo que realmente todavía no se conoce bien, aunque desde luego se le conozca mucho mejor que al principio de la pandemia. Es el motivo de que haya habido tantas incongruencias en la toma de decisiones, un día decir una cosa y al día siguiente decir otra distinta. Es normal que ocurran estas cosas cuando se desconoce y se está aprendiendo día a día. Lo que sí está claro es que se ha llegado a crear una vacuna que es válida en gran medida, aunque no sea efectiva al 100%, pero todo llegará, esperemos. Ahora bien, el tema de la vacunación obligatoria, hagamos una comparación, imaginemos que en lugar de este virus que está azotando el mundo, fuese otro como la viruela, la tuberculosis, la "peste negra" o cualquier otro sumamente contagioso y con el que un contagiado puede matar a otra persona con la que simplemente ha estado junto a ella, ha respirado el mismo aire, ha tosido o estornudado cerca, etc. ¿Sería conveniente obligar la vacunación? sería totalmente necesario, si alguien no quiere vacunarse, esa persona está poniendo en peligro de muerte a todas las personas a las que se acerca. Y esas otras personas no pueden saber si la otra está contagiada o no.

Nacho responde:

Gracias por tus comentarios Antonio, paso a responderlos ordenadamente.

En mi opinión la independencia de la Justicia sí está muy relacionada con toda la crisis del Covid y la polémica de las vacunas, porque hay hechos sobrados que indican que hay muchas irregularidades e ilegalidades sobre esto, de tal forma que si el Poder Judicial fuese más independiente habría actuado de una forma mucho más activa e inquisitiva, sin ir más lejos el hecho de que los fabricantes de las vacunas hayan logrado inmunidad legal por los efectos nocivos de sus vacunas es un claro ejemplo de ello, por no hablar de los médicos y enfermeras represaliados, los decretos inconstitucionales, las multas ilegales, los medios de comunicación promoviendo el odio hacia quienes disienten de la versión oficial y un largo etcétera.

Si la justicia fuese más independiente habría parado los píes mucho mejor y más rápido a quienes están usando esta crisis sanitaria con oscuros fines políticos.

Lo de que la vacuna "sea válida en gran medida", los hechos demuestran lo contrario, países con altos índices de vacunación como Alemania están teniendo más muertes e infecciones que países sin máscaras, tests ni vacunas como Nigeria.

Es un hecho estadístico que son sólo los países occidentales con altos índices de vacunación que están desangrándose debido a este supuesto virus, en cambio todo el Mundo Musulmán, casi toda África, India y muchos otros países subdesarrollados están básicamente como siempre sin haberse vacunado, ni haber usado mascarillas o tests a gran escala.

Todo esto sería motivo más que suficiente para que la Fiscalía abriese una investigación a gran escala y llegase al fondo de la cuestión caiga quien caiga; no lo hace porque no tiene la suficiente independencia para ello.

Lo que planteas de obligar a la gente a vacunarse para proteger a otras personas, es absurdo, las vacunas (si funcionan) protegen a quien las usa, es decir, si tú te vacunas y yo no, aunque yo cogiese la enfermedad a ti no te afectaría porque al estar vacunado estarías protegido (si la vacuna funciona), y si yo quiero correr el riesgo de enfermar es mi problema, no el tuyo.

22/Nov/2021 Alexander dice:

Buenas noches Nacho Me alegra leerlo de nuevo. Aunque no parezcan buenas noticias lo que leo, realmente no es nuevo para mi lo que acá leo. Por eso me alegra ver que en todas partes hay personas atentas a lo que acontece. Aprovecho esta oportunidad para agradecer el artículo anterior de los arreglos en la cocina y las fotos, fui uno de los que comentó que echaba de menos fotos de la isla y la casa. Un estrechón de manos.

 

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Nacho, el autor de esta web

Nacho (el autor de esta web)

En otros tiempos informático, desde 2004 vivo de una forma más coherente conmigo mismo, siendo esta web consecuencia directa de ello, la creé para promocionar mi consultorio y acabé hablando de todo tipo de cosas.

Nací en España hace 46 años, y hace mucho que no llevo una vida "normal", primero viví en un barco durante 10 años, luego en una remota aldea azoriana, y desde junio de 2022 estoy en Argentina en busca de nuevos horizontes.

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